Don Eduardo Zapata. Debajo, su sobrina, Magaly


Nuestra querida corresponsal en América, la infatigable periodista Magaly Zapata, vive esta semana el doloroso trance de haber perdido a su tío Eduardo Zapata, Yayo, su tío Yayo con el que tan estrecha relación familiar tenía.
Aunque la edad nunca perdona en estos casos, aunque todos deberíamos de estar convencidos de que la Vida tiene un final, nunca deja de ser tremendamente doloroso perder a un ser querido y más si entre quien se va y quien se queda hubo una relación tan especial y tan plena de entrañables recuerdos como era el caso.
Don Eduardo Zapata era un personaje de enorme bagaje cultural, lingüista, semiólogo, investigador... tenía amplia formación lingüística y literaria adquirida en la Universidad Católica del Perú y estudios superiores de Semiótica a los que accedió en la Universidad de Bolonia. Todo ello y su constante afán por leer y adquirir permanentemente conocimientos en todos y cada uno de los días de su vida, le llevó a convertirse en un personaje admirable, que -además- trataba siempre de inculcar en los más allegados, virtudes y principios derivados de su generosa y amplia visión de la Vida, convirtiéndose en personaje digno de la admiración de todos los que le conocieron, ya no digamos su sobrina Magaly, a la que le unía una relación familiar acrecentada y basada en el gran cariño manifestado en innumerables ocasiones a lo largo del tiempo común de vida.
A la familia de don Eduardo Zapata queremos hacer llegar desde la TRIBUNA da TAUROMAQUIA, en nombre de todos los que hacemos posible esta web diaria y suplemento-revista semanal, el testimonio de profundo nuestro pesar. Y a nuestra querida compañera, Magaly Zapata, una vez más cabe ya reiterarle lo que en privado le hemos dicho : la Vida es esto, principios y finales. Estar solidariamente con quienes son amigos -aunque la distancia separe- es deseo firme y obligación moral de quienes creemos en el más allá y pedimos a Dios omnipotente que acoja -desde su misericordia y generosidad- a don Eduardo en su seno. Descanse en paz. Y mucho ánimo a Magaly Zapata y familia para sobrellevar esta dura etapa que con la llegada de Septiembre les ha tocado vivir.