CUTERVO : 8 orejas 8. Terna a hombros y por encima del planteamiento de los bravos. Y no hay regalos. Exigencia del toro y resolución de toreros ante valoración del público que respondió y finalmente se entregó y pidió trofeos ante lo ineludible e inevitable. 

CUTERVO (PERÚ).
TEXTO y FOTOS DE MAGALY ZAPATA, CORRESPONSAL EN AMÉRICA DE LA TRIBUNA DA TAUROMAQUIA

8 orejas 8. 
Terna a hombros en la primera corrida y 4ª de abono.
El Fandi, Morenito de Aranda y Alfonso de Lima se repartieron 8 apéndices y se auparon a la foto triunfal de salida a hombros en Cutervo el 27 de junio 2024. 
Una corrida con toros toros de San Pedro y Salamanca, en presentación y más para el coso y con diverso juego y matices, pero un común denominador en la seriedad y ante los que la terna resolvió incluso por encima de las condiciones rematando con la espada según el caso y en especial El Fandi que hizo pleno con 2 de cada uno de su lote. 

Como digo, corridas estas que para los que saben degustar y paladear tanto como valorar los matices de la casta y bravura, ha sido de las que alimentan el alma de aficionado. 
En las tres muletas y por tanto tres expresiones de su particular tauromaquia. 
Si me apuras en plan bullidor, aunque el término no me agrada, El Fandi, enfandilando con las banderillas pero con el correlato de ser el torero de tres tercios. Del que estira y mece los brazos con cadencia por verónicas, del que más allá de banderillas en muleta templa y conduce con suavidad, administrando siempre a favor del toro y del espectáculo y que además es un certero estoqueador y fue por ello que en dos medio toros en condiciones -que no en hechuras- pudo arrebatar y triunfar. Incluso con 4 pares de rehiletes en su segundo. Que le importó ahí se paraba o no, estuvo siempre entregado al disfrute del público. Y finalmente se llevó 4 apéndices solicitados y exigidos. 

Uno de cada uno de su lote se llevó Morenito de Aranda. Si acaso porque en el quinto dejo a medias enterrado el acero pero lo que hubo antes, desde el capote mecido por verónicas pasando por el trasteo fino, cadencioso, templado y de regusto, solventó lo que planteó el burel. Encajado, cargando la suerte, dibujando trazos especialmente por derecha. Todo fue un compendio de buen gusto torero. Ya en su primero nos atisbó algo, pero el quinto se movió más y le dejó estar a poquitos más a gusto. Y a nosotros disfrutar. Categoría y clase, señores. 

Y el nacional no fue menos, no tuvo material en el sexto, ese garbanzo negro, si un paso feo y malo. Pero ya había estado delante del tercero al que sin privativas lanceo a la verónica hasta los medios y en muleta templo y arriesgó por derecho incluso cuando por naturales sabía lo que dejaba atrás. Estocada arriba y petición con fuerza de dos que se le concedieron. 

Me reitero. La tarde tuvo lo que tiene una buena tarde de toros. Toros, diversidad, emoción, y toreo, del entregado, del bullidor, del clásico, del eterno. Hubo para todo paladar. Y eso se agradece y valora.