TRIBUNA da TAUROMAQUIA 
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El llamado "huracán Bastos" ya está ahí, imparable. El chaval va encontrando toro en todo cuanto novillo sin picadores le ponen por delante. Ayer, incluso, en el País Vasco, le echaron "un tío" y el sacó partido, otra puerta grande, en un suma y sigue interminable. Va de plaza en plaza y aprovecha todo lo que puede... Dicen que tiene muy buenas condiciones; desde luego, lo que de el hemos visto así lo atestigua. Hay madera para tallar una gran obra. Ahora que... el camino es largo y no fácil.
Y convendría que con este muchacho no se repitan los errores "familiares" que tarde o temprano se instalaron en la carrera de otro joven portugués del que, decíamos, se puede comer el mundo.... y resulta que solo se come algunas cosas en Extremadura. Convendría escarmentar y ser cautos en el caso de Bastos, escarmentar en cabeza ajena. Y no se tome a mal lo que decimos, sino como sincero consejo, deseando al chico todo lo mejor en el tiempo que viene, faltaría más.

El caso es que el "huracán Bastos" sigue enviando vientos con fuerza, buenos vientos -los del indudable éxito- desde España, como reiterada y puntualmente venimos contando en la TRIBUNA da TAUROMAQUIA. Ahora se trata de cerrar bien, en la misma línea de las últimas semanas, lo que falta de temporada. Y usar el invierno para planificar bien la próxima época, aprovechando muy bien el tiempo, de manera que la nueva temporada pueda arrancar con un debut como novillero con picadores que lance definitivamente a este muchacho camino de lo que sueña ser : un importante torero.