Encaramado en todo lo alto, completamente cerrado y abrazado a la córnea, perfectamente colocado como mandan los cánones, ahí va el forcado...
Encaramado en todo lo alto, completamente cerrado y abrazado a la córnea, perfectamente colocado como mandan los cánones, ahí va el forcado de caras, aguantando estoicamente derrotes y lo que el toro quiera echarle, transportado metros y metros así, en la arena de la plaza, a la espera de que el monento de los ayudas llegue y con ellos, después, el cierre, inmovilización del toro por el resto del grupo, hasta poder darse por consumada la pega.
La imagen tiene, se cumplen ahora, 32 años. Y es actualidad, porque llegamos a un aniversario de aquel día. Fue por estas fechas, en la tradicional corrida de Santo António, en la castiza plaza de Vila Nova da Barquinha. Era tarde de expectación porque aquel día disputaban un concurso de pegas tres importantes grupos de Forcados : Tomar, Alcochete y Aposento da Moita.
Al forcado protagonista de esta foto, que acabaría por ser la de una gran pega, ese día le colmaron de felicitaciones, por lo brillante que estuvo. No hubo discusión : el jurado otorgó el premio a la mejor pega a los Forcados Amadores de Tomar, gracias al buen hacer del forcado de la foto y los 7 compañeros que le secundaron. Era junio de 1990... enorme forcado este João Paulo Ferrador. ¿Les suena, verdad?.
João Paulo Da Silva Simões Lopes ("João Paulo Ferrador" en el ambiente taurino) |