Dejan a Juanito fuera de la Feria de Vila Franca, va a Don Benito y corta cuatro orejas y dos rabos... (¿Qué tal, "padre Ricardo?)
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---Esto, Joaquín, se lo dedicamos al "padre Ricardo", después de lo que nos hizo estos días atrás...
No, seguro que no fue eso lo que Juanito susurró en los oídos de su apoderado mientras lo abrazaba con fuerza y las cámaras del Canal Extremadura daban fe de ello.
No, seguro que no fue aquello lo que dijo Juanito... porque su padre, que es un hombre muy religioso, muy de estampitas de la Virgen de Fátima (por su parte, el "padre Ricardo" -como se sabe- reparte estampitas del Papa Francisco), seguro que ha educado al vástago para no ser rencoroso nunca y para poner la otra mejilla ante cualquier afrenta.
El caso es que Juanito, arreando lo indecible desde que salió su primer toro de "Virgen María", con una infiltración en su rodilla para aguantar los problemas que en ella aún tiene, pisó firme del primer al último minuto...
Se le veía como congestionado al hacer el paseíllo, rostro más colorado de lo habitual, tal vez reflejo de la enorme responsabilidad que tenía encima. Televisión en directo, torear al lado de dos figuras, tener que aprovechar la oportunidad al máximo (tras haberse caído a las diez de últimas de los carteles de Vila Franca de Xira) en una temporada en la que no le han sobrado ni mucho menos las corridas contratadas... Camina o revienta. Juanito quiso, ya en su primero, decir, simbólicamente gritar : ¡no estoy muerto como torero, quiero seguir mi camino...!.
Y comenzó a torear, a un toro que de principio a fin fue bueno (el mismo Juanito lo aplaudió en el arrastre). Toreó João con arrojo, con valentía, con fuerza, con sentido de las distancias, aunque por momentos era tal el ansia de triunfo que parecía ahogar a su oponente. Pero ahí iba, a por todas. Y lo logró, logró poner al público en pie en varias fases de su faena. Juanito, a tope. Pase a pase, tanda a tanda... hasta culminar una actuación de indudable mérito. No se podía fallar con la espada y echar al traste todo lo mucho que en la faena había logrado. Cargó la suerte tras preparar al toro para la muerte. Se volcó por completo Juanito, entró fulminante el espadazo propinado al astado. Cayó este y... cayeron en el esportón de Juanito las orejas y el rabo. Primer toro, la puerta grande ya estaba abierta.
Lejos de allí, de Don Benito, el "padre Ricardo" meditaba...
---¡Si lo llego a saber...!.
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| Se volcó por completo Juanito, entró fulminante el espadazo propinado al primer astado. |
Con el segundo toro, se repetiría la historia. "He buscado y he conseguido por veces el Toreo que quería y el público lo ha entendido", dijo Juanito al terminar la corrida, muy emocionado.
Volvió a ir hacia el callejón, donde estaba Joaquín Domínguez, le dio otro abrazo, esta vez sin decirle nada; de propina, abrazó al hijo de Domínguez... Poco tiene Juanito que agradecer a esos dos, que este año no han andado muy finos a la hora de buscarle colocaciones, pero se ve que el torero no tenía a nadie más a mano en la cercanía tras sus dos grandes faenas.
No se veía por allí al "innombrable". Era como si el torero (2+rabo en su primero, 2+rabo en su segundo) hubiese explotado esta tarde, se hubiese autopropulsado tras los últimos acontecimientos... (la resurrección de Dias Gomes en Lisboa, otra gesta de Tomás Bastos esta misma tarde -4 orejas y un rabo- que se supo a media corrida en Don Benito...). Juanito salió mentalmemte muy presionado en la plaza de Don Benito y dispuesto a dar un zambombazo, como queriendo decir :
---¡Cuidado, eh, que el torero más importante de Portugal sigo siendo yo...!
Y por esto, eso y aquello otro, en su segundo echó el resto. Tal vez la faena tuvo una pizquita menos de gracia que la del primer toro (aunque faena buena, completa, interesante). Se veía a Juanito con ganas y con prisa de redondear lo que había logrado en el primero. Volvió a tener el favor del público porque toreó de nuevo muy bien, dispuesto a todo, a lo que hiciese falta... y volvió a matar de otra estocada importante aunque un pelín menos perfecta que la lograda en el primero, pero el toro dobló igual aunque un poco más tardiamente. Aquello fue un manicomio : una oreja, dos y... el rabo otra vez. Fue un Juanito rotundo, avasallador, poderoso... convencido de principio a fin de que el doble triunfo no se le podía escapar.
Ahora, tras esto hoy sucedido, hay una serie de indivíduos que deberían de entrar en reflexión profunda y penitenciarse... empezando por el propio apoderado del torero que ha estado poco espabilado este año en la gestión de la carrera del matador; continuando por "el innombrable" que sigue metiendo las narices más allá de lo que sería deseable en la carrera de este muchacho que es un gran torero que sería una lástima que se malograse; y acabando por el "padre Ricardo" que no ha querido enterarse de lo que vale un peine y respetar la condición que sigue teniendo Juanito, del torero portugués más importante de un tiempo a esta parte. Todos han jugado a ver "lo suyo", sus particulares intereses. Hasta que al tal Juanito se le hincharon las pelotas y esta tarde reventó todo para decir :
---hagan el favor de respetarme, de ayudarme y de relanzar mi carrera, que no estoy muerto taurinamente, sino dispuesto a ir lo más lejos que pueda....
Llamativo fue que -por dos veces- esta tarde, en los micrófonos del Canal Extremadura, Juanito, a quien cada vez se le conoce más por el torero luso-extremeño, manifestó su más profundo agradecimiento a Extremadura y a los extremeños, "una tierra que me lo ha dado todo, todo lo que he conseguido, en estos 10 años que llevo en ella", recalcó João Silva "Juanito"
Plaza de toros de Don Benito. Corrida del día de Extremadura. 2/3 de entrada. Toros de Fermín Bohórquez (para rejones) y Virgen María, destacando el séptimo toro en orden de lidia que fue premiado con la vuelta al ruedo.
• LEA VICENS, oreja
• ALEJANDRO TALAVANTE, dos orejas y palmas
• GINÉS MARÍN, dos orejas y oreja
• JUANITO, dos orejas y rabo y dos orejas y rabo
