Texto de EUGÉNIO EIROA - Fotos de ARAÚJO MACEIRA
- Se aconseja pulsar sobre cada foto que se desee ver a mayor tamaño y con otro impacto. Todas las fotos corresponden a la habido en la madrugada de este domingo, en la plaza de toros de Nazaré, a puerta cerrada.
--
Era madrugada de este domingo. Se había vaciado ya la plaza de Nazaré. Apenas medio centenar de personas especialmente invitadas quedaban dentro : todas relacionadas con el asunto que iba a acontecer de seguido. Las puertas de la plaza estaban cerradas ya. Nadie podía entrar, salvo ese medio centenar de privilegiados, entre los que estaba el ganadero Veiga padre, el ganadero Veiga hijo, varios taurinos, personal de servicio de la plaza, allegados al torero que vestido de paisano iba a salir al ruedo...
En un lugar del callejón de la plaza, Johana Germán, la esposa del matador, cuidaba de los bártulos de torear de Nuno Casquinha. Sí, era Nuno Casquinha el que iba a ser protagonista de la madrugada nazarena. El torero portugués, como es sabido, anunció que esta temporada volvía a los ruedos tras un corto tiempo de retirada-reflexión.
A Nuno, en su primera etapa como matador de toros, nadie le había regalado nada. Oportunidades, pocas, más bien pocas y no pocas veces de esas que mejor sería que no te las diesen. Aún así peleó siempre y algo obtuvo, que se le reconociese en todo momento como un torero honrado, de verdad frente al toro, comprometido, no falto de técnica y con una ilusión entonces desbordante. No dudó en abordar la aventura americana, toreó lo que otros no querrían torear, con ganaderías muy complicadas en muchas ocasiones, incluso en el llamado Perú profundo y andino especialmente, donde ni enfermerias en condiciones hay en las plazas, pero donde llegó a ser muy apreciado y muy querido. Le reconocieron allí, probablemente, tanto como en la Europa taurina le negaron.
Acabó por retirarse momentáneamente no hace mucho, pese a que sigue siendo más bien joven -a mitad de la treintena ahora- (comenzó con aquel aspecto casi aniñado, cuando era de poca edad). Pasado un tiempo, anunció en el inicio de esta temporada que quería volver a los ruedos, de donde oficialmente no se había retirado, sino apartado temporalmente. Confiaba en que apareciesen oportunidades ya. Pero el Toreo a pie en Portugal le importa muy poco o nada a un sector empresarial donde abundan ahora los forcados y... pasa lo que pasa. Por otra parte, en España y Francia están las cosas muy cerradas, en círculos viciosos la mayor parte de las veces. Abrirse de nuevo camino, "recomeçar", sabe Dios por donde va a pasar... Pero Casquinha quiere torear. Y no ceja en su empeño. Algún empresario como Pombeiro aún se ha acordado de el. Otros, como los Levesinho´s, a la vista está, no lo tienen en sus planes y -además- se cabrean porque -en redes sociales- seguidores de Casquinha hayan reclamado la presencia del torero en corridas en Moita y/o Vila Franca...
En medio de una situación nada halagüeña para conseguir contratos, Casquinha llamó a la puerta de Nazaré y pidió al ex-torero y empresario Rui Bento Vásquez, que le echase una mano, que le facilitase un toro de la corrida de este sábado, para poder torearlo a puerta cerrada, entrenarse así y demostrar -ante medio centenar de "taurinos"- que sigue siendo torero de pies a cabeza. Rui Bento habló con los Veiga, para que no les pareciese mal, tras la corrida a caballo que en el coso nazareno se celebró, apartar uno de los toros y poder lidiarlo y torearlo a pie Nuno Casquinha. Los Veiga se mostraron encantados y padre e hijo se quedaron a ver qué pasaba con el toro en manos de Casquinha. Este eligió el que resultó con diferencia el peor toro de la corrida a caballo... eligió el que peor condición había mostrado, el que había sido el gran borrón en el curro que Manuel Veiga echó en la noche de este sábado en Nazaré. Lo que pasó, lo que sorprendentemente pasó, se lo contamos con detalle luego.
Nuno Casquinha acabó esta madrugada por redimir a los Veiga, que pasaron de tener un toro realmente malo para el toreo a caballo, a convertir -gracias al torero ribatejano- aquello en un toro que, sin llegar a resultar excelente, sí resultó más que aceptable para el toreo a pie... lo cual demuestra, una vez más, aquello de que los toros, en general, son una auténtica caja de sorpresas no pocas veces...
Vayan viendo ustedes algunos detalles y momentos de lo habido esta madrugada, con el toro de Veiga y el toreo de Nuno Casquinha. Tiene ustedes 83 fotos para dar y tomar...
 |
| Casquinha y el ganadero Veiga hijo |
 |
| Rui Bento, al fondo, dio a Casquinha algún que otro buen consejo, mientras Nuno estaba frente al toro |
 |
| Con ganas, con fuerza de principio a fin, Casquinha mostró estar en perfecta forma |
 |
| La verdad : en el capote, el toro no apuntó buenas cosas, por lo que Casquinha procuró abreviar |
En su demostración a puerta cerrada en Nazaré, Casquinha, tras ver con el capote que el toro hacía algún extraño, optó por centrarse en el toreo de muleta, concentrando ahí todos sus esfuerzos, pero sabiendo entender que, de entrada, al toro había que enseñarle quien mandaba en la arena y, una vez logrado esto, hacerle entender cual debería ser el camino, haciéndole embestir y logrando que embistiese. Es decir, cogió un toro que había sido el peor de la corrida a caballo, que estaba crudo (pues en Portugal no se les castiga prácticamente), un toro casi pleno de fuerzas, al que Nuno domeñó en su en principio desconcertante embestida y... poco a poco, enseñándole a embestir, lo acabaría metiendo en el canasto, gracias también a que el toro acabó por mostrar que no dejaba de tener unos buenos orígenes, que le permitieron aflorar su parte positiva...
 |
| Una muy interesante exhibición la de Casquinha... |
No ano 2009, Casquinha tinha 23 anos; era o ano no que alcanzava a sonhada alternativa como matador de toiros. Foi então quando Nuno Casquinha deu uma entrevista aos nossos grandes amigos do jornal O MIRANTE, onde partilhava com os leitores o sonho de menino.
“Quero ser figura e vou fazer tudo para lá chegar”, referia com a convicção de quem abdicou de quase tudo para se dedicar de corpo e alma à formação como toureiro.
---Onde é que despertou para a festa taurina?
---A minha aficion tem muito a ver com a família que sempre teve toiro e cavalos. O meu pai Nuno Casquinha é ganadeiro e o meu avô (António Henriques) tem uma caudelaria que herdou do pai (José Henriques Casquinha); o meu avô Orlando Vicente é campino e sempre lidou com toiros bravos. Com uma família assim, foi fácil entrar neste mundo e desde cedo decidi que queria ser toureiro.
--Nasceu em Lisboa, mas a sua terra é Vila Franca?
--Só fui nascer a Lisboa. Toda a minha infância e juventude foi passada em Vila Franca, excepto quando estive a viver em Madrid e a formar-me na Escola de Toureio de Madrid e no México porque quem quer ser toureiro tem de ir à procura de oportunidade. Apesar de ter passado muito tempo fora, tenho orgulho em ser de Vila Franca.
--Houve algum momento que o marcou para decidir ser toureiro
--É um sonho desde que conheci o mundo taurino. A minha família via muitas corridas e sempre convivi com pessoas ligadas à festa dos toiros. Fiz-me toureiro com naturalidade, parece que já estava destinado ser assim. Sempre gostei muito de ver os toureiros e tudo à sua volta.
--Cresceu numa coudelaria de qualidade. Teria sido mais fácil ser cavaleiro?
--É verdade…(risos). Tinha a vida facilitada porque tinha muitos cavalos de qualidade, mas nunca me passou pela cabeça. Gosto de cavalos, mas tourear é a pé.
--As suas brincadeiras de infância eram à volta dos toiros?
--Quem cresce em Vila Franca deixa-se envolver por este ambiente taurino fantástico. Esta cidade está ligada à festa por vários motivos. Lembro-me de brincar aos toureiros e às largadas na rua.
--Ter a infancia aqui foi determinante
--Ajudou imenso porque nós temos vários incentivos. O toiro está presente na rua e na praça em vários momentos no ano e isso faz-nos viver a tauromaquia com mais intensidade.
--Houve alguma figura que o tenha marcado?
--Não houve nenhum toureiro que me guiasse, mas foi a tauromaquia no seu todo que me aliciou. Tenho fascínio pelo traje de luces, pela arte de tourear, pela ambiente das tentas e das praças. Há um conjunto de coisas no espectáculo que me dizem muito e me dão um enorme prazer.
--O traje de luces é o encanto de qualquer jovem toureiro?
--Sempre estive muito atento aos trajes dos toureiros. O bordado, a cor é algo de grande profundidade artística e ainda hoje é um dos aspectos que valorizo.
--Vila Franca procura uma figura. Será o Nuno Casquinha?
--Eu trabalho todos os dias para ser toureiro e chegar a figura. Vila Franca precisa de um toureiro à séria e Portugal também. Estou empenhado e tenho a ambição de arrastar público em Portugal e quando toureio em Espanha. Quero ser um triunfador que orgulhe Vila Franca e Portugal. Mas só posso garantir trabalho, honestidade e uma grande motivação.
--Tourear em Vila Franca é uma grande responsabilidade?
--A Palha Blanco é uma praça única no mundo. Sente-se um ambiente diferente que não sei explicar muito bem. Tenho tido a felicidade de ser muito acarinhado na minha terra e estou grato ao público de Vila Franca, mesmo aos que me criticam porque querem que eu melhore e consiga cada vez mais.
--O público é exigente e, por vezes, ingrato com os toureiros da terra?
--A verdade é que nunca senti ingratidão. Sempre que venho a Vila Franca dou a cara e os aficionados reconhecem isso. Percebo que, por eu ser de cá, gostem que tudo corra bem, mas têm-me apoiado muito aqui e quando me acompanham noutras praças.
--O toureio a pé é o parente pobre da festa em Portugal?
--Somos muito prejudicados porque há uma moda das corridas a cavalo. Creio que se aparecer um toureiro a pé com força, com garra e com qualidade, o público vai exigir mais corridas a pé e os empresários vão ter que montar as corridas de outra forma. Deus queira que apareçam vários matadores capazes de levar o público às praças.
 |
| Esta madrugada de domingo de Agosto de 2023, en Nazaré, Casquinha reclamó con su toreo poderoso y de verdad frente al toro, las oportunidades que, injustamente, no está teniendo... |
Una docena de años después de aquella entrevista de O MIRANTE, mucho de lo allí dicho por Casquinha sigue vigente. Y a pesar del paso del tiempo y de lo sucedido, Nuno no arroja la toalla.
"...Por enquanto ainda não há retorno do grande investimento que a minha família tem feito. Sei que quando se é figura, ganha-se bastante dinheiro por corrida e temos outro respeito do público, escolhe-se datas para tourear, ganadarias. Mas até lá, temos muito que sonhar e que trabalhar. Ser figura é quase um milagre...", refería no 2009.
---Está ainda confiante e determinado…
---Eu acredito que vou lá chegar e até lá procurarei sentir a felicidade de tourear, mesmo que seja uma vaca num tentadero é um prazer enorme. Temos de desfrutar de todos os momentos que fazem parte desta caminhada. Até o treinar de salão me faz feliz.
---Como é que reage aos críticos da festa que dizem que é um espectáculo bárbaro?
---Nunca conversei com alguém que esteja contra a Festa, mas acho que deveriam informar-se bem para perceberem o caminho de um toiro de lide desde que nasce até que morre. Dizem-se muitas mentiras para denegrir a festa. O toureiro trata o toiro com toda a dignidade. Quem não gosta não vai ver as corridas, mas não tem o direito de denegrir a festa e ofender os aficionados.
Cresceu no mundo taurino. Filho de ganadeiro, neto de criador de cavalos e campino, sobrinho de equitador. Diz que nunca se imaginou a fazer outra coisa. Deixou o curso de técnico agrícola a meio mas aconselha os jovens aspirantes a toureiros a conciliarem os estudos académicos com a ambição de brilhar nas arenas.
Prioridade para a carreira de matador de toiros. Pratica frontón e cuida do físico diariamente. Gosta de jogar futebol com os toureiros, mas o seu passatempo preferido é ver corridas de toiros em directo ou gravadas “para poder rever as imagens” e aprender com os toureiros de renome. Diz que não é supersticioso, mas nunca coloca o sombrero ou a montera em cima da cama e faz sempre uma cruz na arena quando entra na praça. É católico praticante e não dispensa o fio com o crucifixo. A presença de Cristo é importante. Adora os trajes de luces. O objecto mais estranho que lhe atiraram para a arena foi um DVD com imagens das suas actuações. A oferta repetiu-se varias vezes e ainda não sabe quem é que o faz. Nuno Casquinha treina num salão de um local onde guarda as memórias do seu crescimento tauromáquico, as boas e as más. Está lá um símbolo da homenagem ao picador José Paulo que viu morrer num acidente de viação em Setembro quando regressavam de uma corrida em Espanha. Foi um duro golpe. Nuno Casquinha tentou daquela dar a volta por cima. “Um toureiro tem de ser forte. Tem de saber lidar com a glória e com a tragédia dentro e fora das arenas".
