La plaza de Vila Franca de Xira no es una plaza cualquiera. Pero si eso no es de ahora, es de casi siempre en su historia rica y grande; y, ahora precisamente, no puede ni debe pasarse por alto, en estos tiempos de crisis, la gran labor que allí sigue haciendo la empresa Tauroleve, que comanda con incuestionable acierto, Ricardo Levesinho.

Si nos paramos tan solo a ver con algo de detenimiento los dos carteles que hoy reproducimos aquí, en este post, no podemos por menos que convenir que, siendo imposible lograr que estén todos los que son -no hay fechas ni posibles dineros para ello- se ha logrado, una vez más lo realmente importante, aquello de son todos los que están... Todos esos nombres del impresionante segundo cartel son nombres propios, muy importantes, en el actual momento taurino al que se puede aspirar en la Tauromaquia portuguesa.

Con un Campo Pequeno debilitado al máximo, escasamente representativo, el futuro de la Tauromaquia en Portugal va a tener que pasar por potenciar media docena de plazas con solera, trabajando al màximo la temporada en ellas, para tratar así de cubrir, en todo lo que se pueda, la enorme carencia existente tras la vergüenza en que se ha convertido Lisboa...

El ejemplo de lo que se está haciendo en Vila Franca debería de ser secundado en otras plazas portuguesas. Levesinho merece un reconocimiento expreso porque su esfuerzo, en la llamada Sevilla portuguesa, es notorio y acertado, muy acertado.