Impacto enorme han causado las declaraciones a la TRIBUNA da TAUROMAQUIA por parte del cavaleiro Marco José, al que los agentes taurinos parecen haber marginado de un tiempo a esta parte. 

Marco José

Con todo, en lo que dice, nada hay que no sea un secreto a voces. Pero tiene el valor de decirlo, de denunciarlo abiertamente, cosa que otros no hacen, como mucho sugieren, pero -por cobardía- no llaman a las cosas por su nombre. No sé si servirá de mucho o de poco, lo referido por Marco José en esa estupenda entrevista hecha por Jaime Amante y que ya han leído en apenas 15 horas en la Net nada menos que 2.956 visitantes de la TRIBUNA da TAUROMAQUIA IBÉRICA, a los que seguramente se unirán muchos más en horas siguientes...

Marco José es un caso flagrante de injusticia en el Mundo taurino portugués. La muerte del que había sido su apoderado, el inolvidable y ejemplar empresario y gran taurino Agostinho do Santos, le supuso -en momento vital en su trayectoria- la pérdida de un inestimable apoyo. Ahí comenzó su calvario...

Conocí personalmente a Marco José un verano, cuando empezaba el en esto... vi como trabajaba con sus caballos todo el día, en una pequeña quinta alquilada que tenía en la zona de la carretera que va de Leiria a Batalha. Me contó sus ilusiones, su afán por llegar lejos en el Toreo. 
Le hice incluso entonces -eran los tiempos en que no había máquinas digitales, como actualmente- un reportaje fotográfico entre caballos, elementos de la Naturaleza, que aún conservo con agrado impreso en aquel papel Fujifilm que mostraba colores muy bonitos, ahora desvaídos por el paso del tiempo... 

Me llamó la atención cómo Marco José tenía su muy particular Tauromaquia, se había ido haciendo a si mismo, era un formidable autodidacta, aprendía de unos, de otros, tomaba apuntes, veía videos, se machacaba al respecto mentalmente... y a partir de ahí, construía su mundo taurino. 
Era -y es- un cavaleiro muy especial; pero sobre todo era -y es- un formidable equitador; le vi entonces y alguna vez más, trabajando con caballos nuevos y caballos experimentados, ya domados totalmente y enseñados por el desde el primer día ... Me pasé en días alternos, tres o cuatro tardes enteras en su recinto de trabajo diario... 
Desbordaba aquel joven entusiasmo, ganas de salir triunfante en un mundo tan complicado de toros y caballos. Merecía, por el trabajo a conciencia que desarrollaba, llegar lejos. Otros, hijos de papá, tenían caballos ya aprendidos, porque sus progenitores pudientes les compraban caballos semi-automáticos que con solo subirse el jinete a la silla comenzaban a hacer batidas y quiebros... (ha habido casos célebres en esto que digo). Los equinos de Marco José no... eran caballos que sacaba sabe Dios de donde... sin hierro no pocos de ellos, que había que desbastar con infinita paciencia, que había que enseñar todo, absolutamente todo, con el riesgo de emplear un montón de tiempo para que luego el animal, a lo mejor, no sirviese realmente para torear... Pero a Marco José no le quedaba otra. No era de familia a la que sobrase dinero alguno, para andar comprándole caballos de Toreo hechos y derechos al joven que quería ser afamado cavaleiro...

Pero Marco José superó esas carencias iniciales que tuvo y en pocos años de convirtió, por esfuerzo propio, hecho a si mismo, en un torero como Dios manda y un conocedor del mundo del caballo como muy pocos entre sus compañeros de alternativa en el escalafón português. Ahora, en verdad, se preguntará si ha merecido la pena el enorme esfuerzo de tantos años... visto lo que realmente ha cosechado. Tanto esfuerzo para tan poco rendimiento... Pero aún no ha arrojado la toalla. Es un caso de dignidad, de valentía, de grandeza...

Nunca le perdí la pista tras aquel tiempo, aquel verano en que le traté y conocí de cerca, si bien ya no volvimos a estar en contacto ni una sola vez. No le debo nada porque, todo lo más, me invitó a comer juntos : su padre, el y yo, una comida de prisa y corriendo, lo recuerdo, en una especie de take-away en Leiría, el mismo día en que regalé a Marco José una colección de aquellas hermosas fotos hechas en su finca... Con alguna de ellas, poco tiempo después, se publicitó una recordada encerrona del cavaleiro con seis toros, en la plaza de Vila Franca de Xira, a la que también asistí y con la que completé el conocimiento de lo que era como torero a caballo ya, tras haberle visto actuar en media docena de plazas a lo largo de dos veranos anteriores.

Pasó el tiempo desde entonces... ya nunca más estuve con Marco José ni hablé con el. Supe de el por las noticias que iban surgiendo en el mundo taurino. Muchos años desde aquel tiempo hoy evocado. Hasta que, hace pocos días, Jaime Martínez Amante me comentó : voy a hacerle una entrevista a Marco José...

Y ahí está lo que Marco José dice. Con toda razón. Con toda la verdad. Con toda tristeza... porque es triste haber enterrado tantos años ya de tu vida en esto, tener condiciones para triunfar y que no te dejen triunfar porque te cierran las puertas, porque casi siempre torean los mismos, porque por medio hay un juego de intereses que está poco a poco acabando -muy lentamente, eso sí- con la Fiesta.

A Marco José no le habrán permitido triunfar por todo lo alto en la Tauromaquia portuguesa. Pero alzando su voz alto y claro ha logrado ya hacer un grandioso servicio, de honestidad y decencia, a la Fiesta de los Toros. Hacen falta muchos Marco José para poner orden en lo que algunos ya creen, en cierto modo, un Patio de Monipodio.

Patio de Monipodio es la expresión que ha quedado para aludir al lugar donde se reúnen maleantes de diverso tipo. Maleantes, no me atrevo a decir, pero mareantes en el mismo contubernio, sí, ya que según el diccionario, lo son aquellas personas que marean con su continuo movimiento o charla, con su pesadez y su vacuidad. ¿Me explico? ...

"Tive grandes atuações e grandes triunfos que me marcaram e fizeram crescer.
Toureei corridas muito fortes e com as maiores figuras do toureio a cavalo, designadamente com o Paulo Caetano, meu padrinho de alternativa, com o João Moura e Pablo Hermoso de Mendonça, meu padrinho de alternativa em Espanha. Tive enormes triunfos, em inúmeras praças, onde posso realçar, de entre outras, as praças de Reguengos de Monsaraz, de Alcácer do Sal, Vila Franca, Caldas da Rainha, Nazaré, Campo Pequeno, Viana do Castelo e, fora de Portugal, grandes triunfos em Madrid (Espanha), França, Califórnia, América e México. Lidei seis touros da ganadaria Grave a sós, na Praça Palha Blanco (Vila Franca de Xira) em 2001, ano do seu centenário; Lidei touros da ganadaria Miúra, com triunfo assinalado pela imprensa e público, na Praça de Touros de Vila Franca de Xira e em Moura, em 2001; Tive uma saída em ombros da Praça de Touros de Plasencia, de Chillon, em Espanha, onde em 2004, cortei 15 orelhas; Apresentei-me na Praça de Touros de Las Ventas, em Madrid, na comemoração dos 10 anos de alternativa, como cavaleiro profissional; Apresentei-me na Praça de Touros do Campo Pequeno, em Lisboa, no ano da reabertura, com triunfo assinalado pelo público e pela imprensa em 2006, praça aquela onde tomei alternativa na XXXI Corrida TV, em 1995..." 
(In "Jornal Oeste", 20-09-2020)

Programa de mano de la corrida a la que asistimos en Vila Franca de Xira hace 20 años
Eran los tiempos en que la gráfica "A Persistente", de Chamusca, mandaba -y bien- en esto de la cartelería -siempre vistosa- del Mundo de los Toros en Portugal