En el quinto espectáculo de la madrileña Feria de Otoño, en Las Ventas, se anunciaba un solo matador, Antonio Ferrera y los toros generalmente nada fáciles de Adolfo Martín. Las cosas no fueron bien para el torero extremeño, de tal forma que hacia el final del festejo, el mismo Ferrera pidió torear los dos toros consignados como sobreros, lo que en América llaman el toro de 'regalo', pero solo se concedió permiso para lidiar uno, que sería de la ganadería salmantina de Pallarés, al que António Ferrera le cortó una oreja.

El resultado final de la encerrona de Ferrera fue: silencio, ovación, silencio, silencio con un aviso, aplausos con un aviso, silencio con un aviso y oreja en "el de regalo".

En el segundo tercio destacó el banderillero portugués João Ferreira quien saludó 'montera en mano' después de su buen hacer en el sexto y séptimo toros de la corrida.

Ferrera durante su cara a cara con los 6 astifinos de Adolfo Martín (Foto : Plaza 1)