El toro Carbonero II, de la ganadería de los herederos de José Luis Iniesta, que pastan en la finca "Los Espartales", fue indultado en la corrida de toros que se está desarrollando en la plaza de Don Benito (Badajoz). 

La corrida, a la hora de escribir esta nota, debería estar finalizada, pero aún va por el quinto toro, en donde el rejoneador Diego Ventura acaba de cortar dos orejas y rabo que premian más sus condiciones circenses que las taurinas evidenciadas ante un toro portugués de Guiomar Cortes de Moura, toro con buen fondo, pero muy cómodo -Murube al canto- para el rejoneador, y con poca carita ciertamente. Con dos orejas habría sido suficiente para Ventura en este quinto toro de la tarde, pero al público -y al presidente- le gustan los shows donde debía haber verdadero Toreo a Caballo.

Volviendo a Carbonero II, toro de Iniesta, cabe decir que fue un gran toro que repitió de manera incansable en la muleta del portugués Juanito, que -todo hay que decirlo- hizo una gran faena en este su primer toro de la tarde. Variado, dispuesto, arriesgando por momentos todo, Juanito estuvo a gran nivel y mereció las dos orejas y el rabo simbólicos que paseó luego por el ruedo de Don Benito. 

Una vez admitido el indulto por la presidencia, el toro Carbonero II siguió yendo alegre e incansable a muletas y capotes que se le ofrecieron, negándose a irse por la puerta de toriles y permaneciendo en el ruedo durante bastante más de media hora extra... hasta que a alguien se le ocurrió que el toro podía ser evacuado por el callejòn como solución-trampa ante la negativa del morlaco a abandonar el ruedo, terquedad del toro que no dejó de ser un símbolo más de su bravura y entereza.

Las imágenes que acompañan, de la Televisión Extremeña, nos dan idea de algunos momentos de la faena de Juanito con el toro "Carbonero II".