Por Jorge MATA, matador de toros, en EL SIGLO, de Durango (México)

"Qué tal amigos aficionados; estos días en los que se nos invita a guardar, a meditar y sobre todo a estar con Dios, me viene a la mente el fervor que guardamos todos los toreros en el mundo a nuestro Señor Jesús. 

Si bien es cierto que hoy por hoy nuestra fiesta es tan devaluada por gente que ni idea tiene de lo que se trata la fiesta de los toros y mucho menos del peligro que ésta tiene, y por lo tanto ni idea tiene de lo hermosa de ella, está por demás decir que siempre ha existido el peligro en nuestra fiesta brava y que los toreros somos fieles creyentes, ya que al estar jugándose la vida en cualquier ruedo del mundo es necesario estar bien con el de arriba y el que manda en todos los ruedos del planeta taurino, Jesús. 

Cabe hacer mención que existe siempre el peligro en nuestra fiesta de los toros y que en cualquier momento todo aquel que se viste de luces puede perder la vida o tener un percance fatal (dígamelo a mí) y para ello siempre se tiene que estar preparado y sobre todo estar con Dios. Porque aunque la mayoría de la gente lo ve fácil, es quizá nuestra profesión, o sea la del torero, una de las peligrosas y con más misticismo y en la cual siempre se tiene que estar con todos los santos y con toda la bendición antes de salir a partir plaza. 

A continuación pongo en esta humilde tribuna un tributo a todos los “torerillos” que andan por todo el mundo corriendo la “legua” y también a todos los que se juegan la vida en cualquier plazita de cualquier pueblito, en los ruedos más importantes del mundo y sobre todo para todo aquel que ama nuestra profesión, que peligrosa o no, es la más bella del planeta". 

Oh Señor del Gran Poder y Majestad, dador de la fuerza y de las cualidades, te pido perdón por mis debilidades humanas. Te ofrezco sinceramente mi actuación de este día. Te suplico me guíes y ayudes para que difunda en tu nombre el arte y la alegría. Que si suenan en mi honor la música y las palmas, sean ante todo para ti que me apoderas. Que si un fracaso se suma a otro, me des el valor de superarme. Que si un percance viene este día, tenga yo la confianza de que tú lo vas a encauzar para mi provecho. En fin Señor…. Que la fiesta y la afición siempre progresen. Y tú Señora y Reina Santa Madre de Guadalupe cúbreme con tu bendición maternal. Que así sea. Amén.

Como consecuencia de una grave cornada sufrida en 2007 en una plaza de Tabasco, ya en el año 2014,
a este torero de la foto, Jorge Mata, le fue amputada parte de una pierna. Nunca perdió la fe en Dios.
El 24 de febrero de 2007 en la Plaza de Toros Monumental de Villahermosa, Jorge Mata recibió una cornada en la pierna derecha, llegando clínicamente muerto al hospital, donde fue salvado in extremis...

El torero mexicano Jorge Mata, actualmente. Su carrera se truncó pero sigue sonriendo a la Vida.

Con el maestro Arturo Gilio y su cuadrilla